Las espuelas son otra de las ayudas que tiene el jinete/amazona. Su uso es muy delicado porque con ellas se puede fácilmente maltratar al caballo.
Cuando no tenemos los conocimientos suficientes sobre equitación, podemos abusar de este tipo de ayudas para obligar al caballo a realizar una acción, sin antes utilizar métodos más sutiles de convencimiento.
De igual manera, para poder hacer un buen uso de las espuelas, primero debemos tener un caballo domado, es decir bien educado en sus fases inicial, preparatoria e intermedia.
Por ejemplo, si el caballo no conoce las ayudas naturales del jinete (voz, asiento, piernas y manos) y no tiene un “deseo constante de ir hacia adelante” mal haríamos en emplear las espuelas para activarlo.
En cambio, cuando un caballo ha sido bien adiestrado, independientemente si su temperamento es brioso o flemático, éste va a responder inmediatamente a estímulos muy sutiles por parte del jinete.
En ese contexto, vamos a describir los tipos de espuelas más populares y los efectos positivos y negativos que tienen sobre el caballo.
Tipos de espuelas para caballos
El diseño de las espuelas varía de acuerdo al estilo de monta que se practique.
Las espuelas inglesas tienen un “gallo” de diseño sencillo y pequeño, su largo está entre 2 a 3 cm y las puntas más comunes son la recta y la redondeada.
Una buena opción son las espuelas con gallo redondeado de 25 mm que vienen con correas. También te podría interesar unas espuelas de máxima calidad con protección de caucho para las botas y gallo con bola giratoria.
Las espuelas vaqueras, sea para monta española, norteamericana (western) o de cualquier otra región, tienen rodelas móviles y generalmente vienen con diseños decorados. Su efecto puede ser muy fuerte independientemente de su tamaño.
Existe una infinidad de diseños de espuelas pero aquí hemos mostrado únicamente algunos de los más representativos.
El empleo de la pierna
Antes de hablar del uso de la espuela primero debemos considerar una buena posición y uso de la pierna. Nuestra rodilla, relajada, debe conservar su adherencia a la montura. Nuestra pantorrilla debe caer verticalmente manteniendo un contacto mínimo sobre los abdominales del caballo, lista para actuar cuando sea necesario. El peso en el talón para mantener la fijeza de la pierna, pero igualmente relajado, sin empujar el estribo.
En cuanto al orden psíquico, no debemos tolerar que el caballo no reaccione inmediatamente a la mínima acción de las piernas. Pero la solución no es volver a ejercer presión, comenzar a dar patadas o utilizar las espuelas para obtener una respuesta del caballo. La corrección tiene que hacerse con el buen uso de la fusta. El caballo no querrá ser castigado y al volver a pedirle con las piernas que avance, seguramente su respuesta será oportuna. En ese caso el premio con la voz y/o caricia tiene que ser dado de forma inmediata.
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El uso de las espuelas
Teniendo un caballo educado y un jinete/amazona con experiencia, el uso de las espuelas viene a ser una ayuda de “afinación” en estados más avanzados de adiestramiento o desarrollo de cualquier disciplina ecuestre.
Los puntos más importantes a considerar son los siguientes:
- Las espuelas no deben usarse como un mero sistema para crear impulsión.
- Deben aplicarse como un refinamiento de las ayudas naturales.
- La ligereza de las piernas, es decir la obediencia a sus más leves aumentos de presión, se obtiene en un gran porcentaje con el uso experimentado de las espuelas.
- Cuando se aplican solo deben rozar la piel.
- El empleo breve es más eficaz que una aplicación prolongada que sólo provocaría que el caballo se “ensordezca” a ella.
- La colocación de las espuelas es con la curvatura hacia abajo y la hebilla de la correa hacia afuera.
- Las piernas deben estar tan educadas que la espuelas no toquen al caballo si no es necesario.
Por ejemplo, en el nivel avanzado de adiestramiento, las espuelas se utilizan para ejercicios como los cambios de pie en el aire, las piruetas, el piaffe y el passage.
No quiero decir con esto que un caballo no puede aprender estos ejercicios sin el uso de una espuela, lo que quiero indicar es que la espuela, racionalmente utilizada, es una ayuda que nos hará obtener movimientos más expresivos.
En el salto de obstáculos
En esta disciplina pueden usarse cuando comenzamos a pedir progresión en alturas de mayor esfuerzo, de acuerdo al tamaño y aptitudes innatas del caballo. Pero la intensidad con la que se use la espuela y la pierna, debe ser muy bien regulada. Si se aplica con demasiada fuerza hay un gran peligro de derribo.
Quiero mencionar aquí una frase del famoso jinete y profesor francés Jean D’Orgeix: “Al abordar un obstáculo toda acción de la pierna, superior a lo estrictamente necesario, va en detrimento de la altura de la trayectoria”, lo que quiere decir que el caballo se elevará menos si la acción de la espuela es exagerada.
Referencias bibliográficas:
- The British Horse Society (2005). “Manual de equitación”
- Zoe St Aubyn (2008). “Manual de equitación”
